D&O: Certidumbre en un entorno incierto
En la última década, los tipos de interés de los Fondos Federales se han mantenido sistemáticamente por debajo del 2,5% y cerca de cero, desde enero de 2009 hasta enero de 2016. El derrumbe producido por el COVID en febrero de 2020, volvió a situar dichos tipos de interés cerca de cero hasta principios de este año (los tipos de interés preferentes suelen ser un 3% más altos que los de los fondos federales).
Los últimos años de política monetaria fácil, han conducido a un entorno de bajos tipos de interés y a una cantidad de préstamos sin precedentes. Este endeudamiento, sin embargo, ha propiciado la inversión, la investigación y el desarrollo y la innovación. Sin la capacidad de las empresas para tomar deuda a tipos de interés bajos, probablemente no existiría la misma cantidad de capital desplegado hacia nuevas ideas y hacia la mejora de la sociedad. Actualmente, se puede llamar un taxi con desde el teléfono móvil, escuchar sin cables cualquier contenido con sólo pulsar un botón y contratar alojamiento en cualquier lugar del mundo sin pasar por el sector de reservas de un hotel. La inversión conduce al crecimiento; es por esto que el indicador del crecimiento del PIB en la última década, de casi un 53%, es muy claro.
El estímulo fiscal y monetario relacionado con la pandemia, las interrupciones de la cadena de suministro y el conflicto entre Rusia y Ucrania, han alimentado la inflación durante el último año y medio. Esto empujó a la Reserva Federal a subir los tipos de interés a un ritmo inusitado desde principios de la década de 1980.
El aumento de los tipos de interés, la falta de inversiones rentables, la menor actividad económica y las fluctuaciones de los tipos de cambio, son retos que ponen a prueba el balance de una empresa y podrían dar lugar a demandas contra la empresa y sus Directivos y Gerentes (D&O). A saber:
- Demandas interpuestas por accionistas/prestamistas: En caso que los activos líquidos de una empresa fuesen mantenidos en base a bonos a largo plazo y a tipos de interés bajos, el costo de oportunidad podría ser lo suficientemente importante como para que se alegue un incumplimiento del deber respecto de la forma en que los administradores y directivos gestionan las finanzas. El incumplimiento del deber de diligencia también puede incluir la no venta de una parte no rentable del negocio y/o la pérdida de buenas oportunidades de inversión, especialmente si los competidores realizan inversiones.
- Tergiversación: Este tipo de reclamaciones puede surgir debido a la divulgación inadecuada o inexacta de información financiera. Los acreedores pueden alegar que los préstamos fueron concedidos en base a datos financieros inexactos- Asimismo, pueden surgir reclamaciones por declaraciones falsas e información inexacta o engañosa sobre la empresa
- Fusiones y adquisiciones: Las empresas participan a menudo en fusiones y adquisiciones, y pueden surgir riesgos al comprar o al vender. Las reclamaciones de antiguos acreedores o vendedores, accionistas descontentos o acusaciones de no realización de la diligencia debida, son ejemplos de posibles reclamaciones. Como ya se ha mencionado, las acusaciones de declaraciones falsas o engañosas sobre la cuota de mercado o sobre la salud financiera de la empresa son escenarios potenciales que podrían surgir de cualquiera de las partes al momento de realizar el acuerdo.
- Demandas presentadas por empleados, clientes, proveedores y/o competidores: El acoso y la discriminación, hasta la publicidad engañosa, la infracción de patentes y las violaciones de la legislación antimonopolio, son riesgos habituales. Los empleados actuales no son la única fuente de reclamaciones contra una empresa de responsabilidad civil. Cuando una empresa contrata un nuevo empleado, existe la posibilidad que un competidor presente una demanda. Los competidores suelen presentar demandas alegando el robo de datos sensibles o de secretos comerciales por parte del ex empleado, que darían a su nuevo empleador una ventaja competitiva.
El contexto macroeconómico actual no es el mismo que el de hace una década. Existe una sensación de inquietud, de inestabilidad e incertidumbre en las economías de todo el mundo. El seguro de D&O es una herramienta financiera para ayudar a los directores y ejecutivos a sentirse más seguros en su toma de decisiones y a proporcionar certidumbre, especialmente en tiempos de incertidumbre.
FUENTE: www.propertycasualty360.com