El incierto panorama jurídico de la IA aumenta el riesgo de litigios
Según la agencia de suscripción especializada Rising Edge, el uso de la inteligencia artificial (IA) y las declaraciones relacionadas con esta tecnología, muy probablemente generen demandas colectivas de seguridad en los Estados Unidos, mientras que a nivel internacional, la agencia espera un aumento de la investigación regulatoria relacionada con la privacidad de los datos y con las acciones derivadas.
The Rising Edge 2025 Forecast, afirma que el uso generalizado de la IA continuará con su impacto transformador en todas las industrias, impulsando un debate significativo dentro de la comunidad de D&O en 2025, en relación con la forma de evaluación del risgo del impacto del uso de la IA en las empresas.
Con la aceleración de la adopción de la IA, la complejidad de sus riesgos asociados para las empresas aumentará, entre ellos, los normativos, los operativos y los reputacionales. Las empresas deberán enfrentar las implicaciones de la IA en sus operaciones, en sus empleados, en sus clientes, en sus accionistas y en las partes interesadas en general.
No obstante, la falta de una regulación global coherente creará un panorama legal incierto, aumentando el riesgo de litigios. Esto resaltará en el ámbito de las demandas colectivas de los Estados Unidos, donde los anuncios o los acontecimientos negativos sobre la IA provocarán caídas en el precio de las acciones.
Rising Edge señala que, en la última década, se han planteado preguntas sobre la capacidad de los consejos de administración para la evaluación de la preparación ante el riesgo cibernético. La complejidad que conlleva el potencial de innovación de la IA ampliará la brecha de conocimientos tecnológicos y es predecible que los suscriptores de D&O también encuentren dificultades para la evaluación del papel que desempeña la IA en la calidad del riesgo.
Rising Edge afirma la previsión de un aumento significativo de la frecuencia y de la gravedad de los delitos tecnológicos, con consecuencias que incluirán litigios de D&O, ya que las empresas enfrentarán acciones legales de accionistas y de partes interesadas afectadas.
Asimismo, la previsión afirma el enfrentamiento del mundo corporativo a un escrutinio continuo relacionado con las iniciativas DEI en 2025, en particular en los Estados Unidos, señalando que la creciente reacción ya ha llevado a muchas empresas a revertir sus políticas DEI.
¿Existirá la misma tendencia fuera de los Estados Unidos? «Los indicios apuntan a que no se replicará la tendencia, como, por ejemplo, en el Reino Unido, donde un gobierno laborista introduce leyes que, posiblemente, lleven a la agenda en la dirección opuesta.
Para añadir mayor complejidad, las empresas que van en una dirección no siempre coinciden con las esperanzas y con expectativas de la sociedad y, lo que es más importante para las empresas, con las expectativas de sus empleados. Las empresas (y sus directivos) con operatoria en varias jurisdicciones, con puntos de vista opuestos sobre DEI y ESG, deberán esperar contar con buena fortuna.
Rising Edge entiende que la reacción contra la DEI (y la ESG en general) dará lugar a incoherencias jurídicas con las leyes y con las normativas vigentes contra la discriminación y contra el cambio climático, lo que pondrá en manos de los tribunales la tarea de trazar la línea divisoria. Todo ello se traducirá en un aumento de los conflictos laborales, de las investigaciones reguladoras, de los litigios entre accionistas y de las acciones dirigidas por activistas, incluso a través del activismo financiado mediante litigios y crowdfunding.
FUENTE: www.commercialriskonline.com