«Hay que trabajar con sistemas de producción sostenibles, no subsidiados»
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) tiene varias propuestas de proyectos y a la vez recomendaciones para Paraguay, como país productor y rico en recursos naturales.
Una delegación de la FAO, encabezada por el director general QU Dongyu, visitó Paraguay y conversó con autoridades acerca del potencial productivo que tiene el país. El economista jefe de la organización, Máximo Torero, dio detalles de los proyectos que se pretenden encarar con los agricultores, especialmente con relación a los seguros y la acuicultura.
–¿Qué actividades tuvo la delegación de la FAO en la última semana en Paraguay?
–Hemos venido a una misión de poco tiempo. Hemos tenido reuniones con el presidente de la República, con la primera dama, el ministro de Agricultura, de Relaciones Exteriores, reuniones con el sector privado y con productores; hemos estado en una zona de pesca. El objetivo de nuestra visita fue ofrecer la asistencia técnica a Paraguay en temas muy puntuales y sobre todo el Programa Mano de la Mano que hemos iniciado en la FAO hace cuatro años. El programa trabaja con los países para identificar, a través de planificación territorial, cuáles son las zonas donde se puede invertir para reducir la pobreza y hacer que los productores agrícolas, donde la agricultura incluye pesca, productos agrícolas y ganaderos, puedan lograr el potencial que tienen, dadas sus condiciones agroecológicas. Una vez que se identifican los productos y las zonas, se trabaja en planes de inversión, donde la FAO facilita los procesos de promoción al sector privado, a las bancas internacionales y multilaterales para que se puedan financiar esos planes. Por ejemplo, en la zona que hemos estado, la idea es promocionar la acuicultura porque ahora la pesca es artesanal y depende mucho de la suerte de los pescadores que puedan conseguir pescado, mientras que si ese diseña un programa de inversión van a tener un ingreso más sostenible en el tiempo. Nos enfocamos en pequeños productores.
–¿En qué etapa está ese proyecto?
–Estamos empezando; la idea es que para octubre tienen que ir a presentar los planes de inversión en el Foro Mundial de Alimentos, donde hay dos días dedicados a planes de inversión. Se identifican los perfiles de inversión; con eso se identifica el número de beneficiarios, la magnitud de la inversión, pero debe ser rentable, privada y socialmente, para que los inversionistas lo vean atractivo. Nuestro trabajo es cómo hacemos con un país como Paraguay, que tiene enormes recursos naturales, que les permite ser uno de los principales productores de soja, de trigo, de maíz y también a su vez una biodiversidad enorme, pueda tener mecanismos de resiliencia para no verse tan afectado por la sequía; por ejemplo, cómo mejorar la capacidad del seguro agrícola, también el seguro catastrófico, cómo acelerar el proceso de seguros que permitan ayudar en las situaciones de sequías largas, cómo incrementar la eficiencia en la producción, sobre todo lo que es la agricultura familiar, y esto se refiere a mapas de suelos especializados de alta resolución que le permita al país poder utilizar de la forma más eficiente los insumos, porque ahora los fertilizantes subieron mucho y eso afectó mucho a los productores. Y a su vez ver cómo se puede ayudar a Paraguay a diversificar su portafolio de producción, que no solo sea soja o maíz, que son elementos útiles y excelentes para poder exportar para el mundo, pero que también permitan que tengan otros productos para tener vida saludable.
–¿Se refiere a una diversificación que apunte al autoabastecimiento de alimentos?
–Tener acceso a una mayor cantidad de alimentos más que autoabastecimiento, porque siempre puedes importar. Cuando hablamos de resiliencia, le llamamos el índice de absorción; entonces tienes tres elementos: uno es cuánto produces localmente y qué tan diversificado está; el otro es cuánto importas y exportas; y el tercero es cuánto stocks tienes. Entonces se busca optimizar el portafolio, porque tampoco quieres producir cosas que no son rentables por tu clima o tu suelo; entonces tú quieres producir donde tienes ventajas comparativas; eso tienes que hacerlo.
–¿Cuáles serían los rubros que se deben potenciar para avanzar en la diversificación?
–Estamos hablando de acuicultura, porque el pescado es muy nutritivo y muy eficiente; además, porque lo que le das al alimento al pescado genera mucho más resultado que el pollo o el chancho; se puede ver cómo acelerar la producción de hortalizas, pero todo va a depender de la región en la que trabajemos.
–¿Cuál sería el proyecto para las hortalizas, teniendo en cuenta que en Paraguay no producimos semillas de este rubro y tenemos una alta dependencia de la importación?
–Yo creo que ahí lo que tenemos que asegurar es que toda la cadena de operación funcione. Sí deberían tener la capacidad de generar sus propias semillas; deberían ser semillas de calidad y deberían tener la capacidad de temporalidad de producción. Son productos de alto valor; es importante tener estructura de riego y hacerlo en ambientes controlados, porque si tienes temperaturas muy altas va a sufrir mucho la planta. Hablamos de agricultura de precisión, de producción cubierta y tecnificado.
–¿Cuáles son las acciones que debe encarar el Estado para lograr eso?
–El rol del Gobierno es facilitar de que este tipo de proyectos se puedan implementar, dar los mecanismos, la regulación y el entorno para que el inversor pueda venir, porque lo que quieres es que sea un sistema sostenible, no subsidiado. Puede ser que tengas que hacer subsidios iniciales, pero en el mediano y largo plazo tú quisieras que la inversión te ayude a eso, sea rentable por sí solo.
–El seguro agrícola para pequeños productores no tuvo éxito en Paraguay. ¿Cuál es la recomendación de la FAO al respecto?
–Nosotros ahora queremos también hacer un seguro agrícola mayor, que es un seguro al que le llamamos catastrófico; es para varios países en el mundo, incluyendo Paraguay, de tal forma que diversificamos el portafolio de riesgos. Por ejemplo, cuando te afecta una sequía, te afecta una zona; si ocurre consecutivamente nadie te va a asegurar; entonces lo que tienes que hacer es ver cómo diversificar esa probabilidad de sequía con Zimbabue, en Perú o en otro país del mundo, de tal forma que la prima del seguro baje. Para eso necesitas estimar la probabilidad del evento y saber cuánto puede ser comercial y cuánto apoyarlo. Este modelo está en planeamiento y esperamos poder implementarlo pronto. Se han dado este tipo de seguros catastróficos para el ébola, por ejemplo, que lo hizo el Banco Mundial, pero no se han dado para el sistema agroalimentario; nosotros queremos un diseño parecido. Si logramos armar un sistema de información apropiado para ayudar a las aseguradoras, esto fundamentalmente es financiado por ellas; es financiada la parte que no es comercial por donaciones, pero el objetivo es que ese tramo no comercial no sea muy grande.
–¿Cómo se debe encarar la desigualdad que existe entre los grandes y pequeños productores en el acceso a insumos y tecnología?
–Se tiene que ver qué tipo de bienes públicos se pueden proveer para estar en la misma condición que un agricultor grande. El rol del Gobierno con el gran productor es darle el ambiente estable para que pueda hacer sus inversiones y pueda hacer sus exportaciones y pueda trabajar. El rol para él, para la agricultura familiar, es proveerle de bienes públicos. Por ejemplo, el gran productor tiene mapas de suelos, está automatizado, tiene economía digital y agricultura de precisión; si la agricultura familiar podría hacer lo mismo; si tuviera acceso, se les podría proveer a través del Gobierno la información de mapas de suelo a su celular y podrían optimizar la utilización del fertilizante, de tal manera a que aumente su eficiencia y productividad.
–¿Puede seguir siendo la deuda pública una fuente de financiamiento para el sector productivo?
–Bueno, como economista el problema de deuda que tenemos hoy en día, y en Paraguay también, es un problema con las tasas de interés tan altas que están empezando a subir; eso te genera un problema de endeudamiento, porque si la tasa de intereses sube, tu endeudamiento es más riesgoso y, ergo, tienes que tener una rentabilidad mucho más alta tú de tu inversión privada o social para poder incurrir en más deudas. Si decides hacerlo con deuda pública tienes que tener mucho cuidado del retorno de tu inversión de tal forma que tenga sentido hacerlo y para eso la priorización es central. Si el país mejora su rating en el mundo, si Paraguay se vuelve un país reconocido en el mundo, que tiene una rentabilidad mayor, por ejemplo, sabemos que va a crecer más que otros países de la región y, en ese sentido, el mercado de bonos soberanos te puede dar oportunidades mucho más baratas que la banca multilateral, entonces ustedes tienen que armar su propio portafolio de deudas. Yo creo que Paraguay podría atraer mucha inversión privada si es que dan las condiciones para que esto se dé; por ejemplo, están trabajando con etanol y biocombustibles; entonces cómo se puede vincular eso a la industria de carros, sistemas similares al brasileño. Tenemos que diseñar todos esos programas que te permitan optimizar ese tipo de inversiones y siempre teniendo cuidado de que, si estamos en una situación de precios altos de alimentos, no deberíamos estar produciendo biocombustibles con maíz.
–¿Cuál es la posición de la FAO acerca de las transferencias monetarias, subsidios, que entrega el Estado en el marco de emergencias a los pequeños productores?
–Si tenemos una población que está en situación de emergencia porque no puede comprar alimentos y que pueden caer en malnutrición, para eso están los programas de protección social; ustedes tienen buenos programas y con el Covid lo han demostrado. El truco para que eso funcione bien es que tu lista sea actualizada permanentemente de beneficiarios para que estés focalizando a la gente que realmente necesita; eso es emergencia y no tiene nada que ver con producción. El otro problema es si tengo productores que tienen un problema y los puedes ayudar con acceso a financiamiento, tal vez subsidiando inicialmente, porque lo que no hay en el sistema financiero de acá, por ejemplo, igual que en muchos países, no hay un sistema de riesgo de un productor agrícola. Como hay un riesgo muy alto el banco prefiere no meterse o cobrar un interés muy alto; entonces el Gobierno debería apoyar en diseñar un sistema de información para darles un sistema de riesgo al ser productor agrícola; entonces ahí si tiene sentido un subsidio porque es un subsidio temporal donde vas a ayudar al desarrollo de algo que en el futuro contribuirá a la bancarización. Los subsidios deben ser temporales porque si no crean distorsiones. Lo peor que puedes hacer es subsidiar fertilizantes, porque los más ineficientes son los que van a usar el subsidio y los eficientes se van a ver distorsionados.
–¿Cómo influye la transparencia del uso de recursos en el desarrollo productivo?
–Recomendamos a un país como Paraguay, que tiene tanto potencial agrícola, de seguir trabajando con la ciencia, ver la innovación tecnológica, invertir en bienes públicos para reducir las desigualdades y tener un mecanismo de priorización de inversiones, es esencial, debe tener la idea de por qué invierto en esta área y no en esta área.
El rol del Gobierno es dar los mecanismos, la regulación y el entorno para que el inversor pueda venir, porque lo que quieres es que sea un sistema sostenible, no subsidiado.
Creo que hay una gran oportunidad para la economía digital que puede ayudar mucho a los pequeños productores, que brinde información de precios y asistencia técnica virtual.
Recomendamos seguir trabajando con la ciencia, ver la innovación tecnológica, invertir en bienes públicos para reducir las desigualdades y tener un mecanismo de priorización de inversiones.
Perfil
Antes de desempeñase como economista jefe de la FAO, Máximo Torero Cullen, de nacionalidad peruana, fue subdirector general responsable del Departamento de Desarrollo Económico y Social. Antes fue director ejecutivo del Grupo del Banco Mundial para Argentina, Bolivia, Chile, Paraguay, Perú y Uruguay. También llegó a dirigir la División de Mercados, Comercio e Instituciones del Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias.
FUENTE: www.ultimahora.com