Interés General

En 2022, los datos transformarán el sector de los seguros

En el futuro, las nuevas formas de trabajar, desde la gestión de datos hasta los dispositivos IoT, impulsarán a las aseguradoras.

El sector de los seguros se rige en gran medida por los datos. Incluso, previo a la aparición de herramientas analíticas ampliamente disponibles, las aseguradoras se basaban en el análisis estadístico para evaluar el riesgo y fijar el precio de las pólizas. Una mayor disponibilidad de datos significa una mejora en la toma de decisiones, pero también requiere de una inversión en la integridad de los datos para garantizar su fiabilidad.

De cara a 2022 y más allá, se exponen a continuación las principales tendencias en materia de datos que afectarán al sector de los seguros:

Con el continuo crecimiento de los big data y la cloud analytics, la gestión de los datos es una preocupación primordial para el sector de los seguros, dados los retos asociados a los procesos de uso intensivo de los mismos.

Además, la existencia de silos de datos hace que la integración de los mismos signifique un gran obstáculo y ralentice su flujo, al mismo tiempo que contribuye a la falta de contexto en torno a los ellos.

Para superar estos obstáculos en la gestión de la información, en 2022 las compañías de seguros invertirán en la integridad de los datos para:

– Integrar fuentes de datos dispares y tenerlas a disposición donde y cuando sean necesarias.

– Gestionar proactivamente la calidad de los datos garantizando su precisión, coherencia e integridad.

– Añadir contexto mediante el enriquecimiento de datos y la inteligencia de localización.

– Proporcionar un marco de gestión global.

De este modo, las compañías de seguros podrán gestionar sus datos y confiar en ellos para tomar mejores decisiones empresariales.

La inversión en inteligencia artificial (IA) está aumentando entre las aseguradoras, especialmente en lo que respecta a la detección de fraudes, la suscripción y la optimización de los procesos de gestión de siniestros. El acceso más rápido a la información es fundamental y su enriquecimiento con datos de terceros mejora la información.

Las aseguradoras ya han aprovechado el poder de la IA, pero 2022 puede ser el año en que exploten todo su potencial. Al invertir en mejores datos, los sistemas de IA madurarán y conducirán a una toma de decisiones más inteligente y rápida.

A medida que los dispositivos IoT se expandan y se desarrollen nuevas aplicaciones para la tecnología móvil, más aseguradoras la utilizarán para calcular las pólizas con precisión. Los datos recogidos de estos dispositivos apoyarán tanto a la IA más inteligente como a la mejora de las percepciones y acciones basadas en el aprendizaje automático.

Los datos fidedignos con contexto de localización permiten a una aseguradora fijar el precio correspondiente, mitigar la exposición al riesgo y mejorar las tasas de reaseguro.

Las presiones regulatorias en torno a la privacidad, la soberanía y la gestión de los datos, han aumentado en los últimos años; basta con mirar el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) en Europa como ejemplo.

A medida que aumente el volumen de datos que utilizan las aseguradoras, el escrutinio normativo aumentará también.

Hacer realidad la promesa de los conocimientos de big data, incluyendo el IoT y la inteligencia de localización, es algo que las aseguradoras han anticipado durante años. En 2022, las empresas seguirán invirtiendo en sus datos y optimizando el rendimiento.

FUENTE: www.propertycasualty360.com